
Una se dedica últimamente a reflexionar sobre cosas extrañas y que no creo que solucionen nada, sobretodo porqué a veces se está un poco harta de estar siempre pringando con un montón de trabajo que parece que no le va a solucionar mucho en la vida. Es decir, ¿se valora realmente a la gente que trabaja duro, o en el fondo todo el mundo quisiera ser una de esos ricos herederos que se pasan la vida de fiesta en fiesta y de mansión en mansión?
El hecho es que a la hora de admirar a alguien, se piensa en Supermán o Indiana Jones, o del tipo ese que se dedica a escalar los edificios emblemáticos de todo el mundo, o de uno que ha dado la vuelta al mundo en un catamarán solito y del tirón. No se nos ocurre apreciar o valorar otras cosas, como por ejemplo a un médico pringado de turno que después de pasarse ocho años estudiando se dedica a investigar curas contra el cáncer dependiendo de una subvención que le pueden retirar en cualquier momento, o los seres suprahumanos que son capaces de ganar una oposición para ser juez en un año, o incluso los reporteros de “Callejeros”. Hasta esas mujeres que son capaces de ir como recién salidas de una sesión del Vogue con un presupuesto bajo y tirando del Zara.
Porque, a ver, ¿qué mérito tiene ser tan ricachón que te de igual perder un año dando la vuelta al mundo, y ser tan autista como para no querer saber de nadie en todo el trayecto? El cine también se pasa muchas veces: ¿Alguien cree que Indiana Jones es un héroe porqué tenía que recuperar el Santo Grial para salvar el mundo? Pues no!! Seguro que lo quería para subastarlo y sacar una pasta como han hecho con las fotos de Carla Bruni. Y al respecto, a mí que me perdonen, es muy guapa y canta bien, pero tiene una teta en Cuenca y la otra en Pernambuco.
Así que al final mi reflexión sobre la gente que hay que admirar acabó por deprimirme del todo. Parece que estamos influenciando a la gente a aspirar a ser como mucho unas pseudo Paris Hilton recauchutadas, o a tener que ser futbolistas sí o sí, más que a hacer cosas más provechosas para la humanidad. Y eso hace que una se pregunte hasta qué punto vale la pena el esfuerzo que se emplea en ciertas cosas, aunque también es cierto que si para dejar este esfuerzo inútil me tengo que volver una rubia falsa que viste siempre de rosa y que tiene la cara asimétrica, mejor sigo currando. De todas formas no creo que nadie subastara mis fotos en Sotheby’s…
El hecho es que a la hora de admirar a alguien, se piensa en Supermán o Indiana Jones, o del tipo ese que se dedica a escalar los edificios emblemáticos de todo el mundo, o de uno que ha dado la vuelta al mundo en un catamarán solito y del tirón. No se nos ocurre apreciar o valorar otras cosas, como por ejemplo a un médico pringado de turno que después de pasarse ocho años estudiando se dedica a investigar curas contra el cáncer dependiendo de una subvención que le pueden retirar en cualquier momento, o los seres suprahumanos que son capaces de ganar una oposición para ser juez en un año, o incluso los reporteros de “Callejeros”. Hasta esas mujeres que son capaces de ir como recién salidas de una sesión del Vogue con un presupuesto bajo y tirando del Zara.
Porque, a ver, ¿qué mérito tiene ser tan ricachón que te de igual perder un año dando la vuelta al mundo, y ser tan autista como para no querer saber de nadie en todo el trayecto? El cine también se pasa muchas veces: ¿Alguien cree que Indiana Jones es un héroe porqué tenía que recuperar el Santo Grial para salvar el mundo? Pues no!! Seguro que lo quería para subastarlo y sacar una pasta como han hecho con las fotos de Carla Bruni. Y al respecto, a mí que me perdonen, es muy guapa y canta bien, pero tiene una teta en Cuenca y la otra en Pernambuco.
Así que al final mi reflexión sobre la gente que hay que admirar acabó por deprimirme del todo. Parece que estamos influenciando a la gente a aspirar a ser como mucho unas pseudo Paris Hilton recauchutadas, o a tener que ser futbolistas sí o sí, más que a hacer cosas más provechosas para la humanidad. Y eso hace que una se pregunte hasta qué punto vale la pena el esfuerzo que se emplea en ciertas cosas, aunque también es cierto que si para dejar este esfuerzo inútil me tengo que volver una rubia falsa que viste siempre de rosa y que tiene la cara asimétrica, mejor sigo currando. De todas formas no creo que nadie subastara mis fotos en Sotheby’s…
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Sé que llevo un mes sin actualizar y que probablemente me pase otro sin hacerlo de nuevo, pero agradezco a todos aquellos que me postean y aprovecho para decir que a pesar de no comentar nada, suelo leer todos los blogs conocidos... Os dejo una canción que no puedo dejar de escuchar últimamente.
4 comentarios:
Bueno,¡este post es de premio! Estoy totalmente de acuerdo contigo, tendríamos que acabar con todos esos que se autonombran héroes (porque creo que es lo que pasa, que como tienen pasta a punta pala compran los medios de comunicación y dicen todo lo bueno que hacen para que la gente les considere magnánimos y excelentes, cuando en realidad son la podredumbre social más grande) y empezar a valorar más a los héroes cotidianos, que son muchos.
Lo que pasa es que a lo mejor lo que está mal es el concepto de héroe, y a quiénes se refiere en realidad es a los listos que sacan partido de la estupidez de los demás o de la suya propia y la incapacidad de hacer nada de los demás.
Qué complicado. En fin, en cualquier caso, me encanta leerte y que me hagas plantearme estas cosas un sábado por la mañana. Te seguiré leyendo, tardes lo que tardes en actualizar :)
Patri, jo també comparteixo la teva opinió. No crec que no es valori el treball ben fet i l'esforç. Sí que es valora, nosaltres ho fem. El problema és que dóna menys fruits i tot i que en dóna a llarg termini, es fan pregar. És més simple ser un hereu de bona casa que no ha de patir per res, però potser (o així em vull consolar) és menys gratificant.
Petons,
V.
P.S. Les opositores a Inspecció també són d'admirar!
Hay mucha clase de gente... hay quienes admiran a Torrente... hay quienes admiran a Charles Lyell...
“Dime quién te admira y te diré lo que eres.” (Charles Augustin Sainte-Beuve)
patriiii
que nos han inmortalizado a los dos en el concierto de algora
www.flashatnight.com
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