lunes, 10 de diciembre de 2007

...y a mí me llamaban GAFOTAS

Mis salidas nocturnas por Barcelona se han ido distanciando últimamente, y eso ha hecho que algunos cambios que experimenta la fauna nocturna barcelonesa me hayan sorprendido. Parece ser que las nuevas modas se van introduciendo poco a poco, de forma casi imperceptible para quien suele salir a menudo, pero si te pasas un mes o dos sin salir, te das cuenta de que algo ha cambiado y no puedes dejar de sorprenderte porqué parece ser que los demás no se han dado cuenta.

La moda es un tema que me llama la atención y me interesa. El otro día algunas amigas y yo nos divertíamos viendo entrar a la gente en un local de copas y comentando su indumentaria. No se trata de critiqueo, como algún comentario afilado nos espetó; simplemente me gusta la moda, y salir por Barcelona y ser observadora es tan interesante como ojear las páginas del Vogue, puede que más.

La cuestión es que vi que se ha extendido la curiosa moda de llevar puestas gafas de pasta bastante grandes y cantonas, totalmente pasadas de moda y cuanto más llamativas y extravagantes, mejor. Hace tiempo ya había visto algun ejemplo. Entonces me pareció que la persona en cuestión llevaba un look curioso, desde luego no dejaba a nadie indiferente, y aunque no hubiese copiado su imagen jamás, me pareció tan arriesgado y original que mereció toda mi admiración. En el fondo este mundo vive de la innovación, y aquella imagen me quedó grabada y me pareció genial.

A partir de ahí, punto y aparte. Es cierto que cada temporada existen prendas, looks o complementos que se califican en las revistas y foros como "musts" y que acabas viendo por todas partes; yo soy la primera que caigo. Pero la gracia de la moda es poder adaptar cada prenda a tu propio estilo, esa, y la de aceptar que hay cosas que por muy de moda que estén, no tienen que copiarse, o no te sientan bien.

La imagen de un tropel de chicas ataviadas con ropas totalmente distintas y llevando todas ellas este tipo de gafas causó un shock en mi. Sobretodo porqué ninguna de ellas parecía tener problemas de vista, a juzgar por el hecho de que las monturas ¡No llevaban cristales! En ese momento mi mente no pudo evitar pensar en "La venganza de los novatos", una peli bastante cutre de hace mil años.



Una cosa es innovar, y la otra copiar las extravagancias de los demás para llamar la atención. Es cierto que este estilo llamado "nerd" se está reincorporando en las colecciones de moda, los chalecos, las pajaritas y las mencionadas monturas de pasta enormes... pero desde un punto de vista actual y renovado. No alcanzo a comprender la gracia de copiar modas que no sientan bien y te hacen parecer bastante tonto. Aquella persona hace meses me pareció un individuo creativo y abierto de mente; el coro de nerds del otro día me pareció ridículo.


La foto es de la última colección de monturas de la casa Chanel (por poner un ejemplo, jeje)



¿qué opináis, hay que seguir los dictados de la moda aunque te hagan parecer idiota, o los pasamos por nuestro propio filtro?

3 comentarios:

Raúl dijo...

creo que hay que pasarlas por nuestro propio filtro. a mi por ejemplo las wayfarer me quedan fatal (cosa rara, porque soy tan divino que me queda bien casi todo)

por eso no las tengo. custo es capaz de hacerte una maravilla como la cosa más horrible del mundo...

filtro, filtro, filtro! y si no que se lo digan a paris hilton, que es muy fashion pero es una hortera de cojones

Patri dijo...

Di que sí raúl, moderno pero con moderación.
PD: menos mal que tu lees mi blog! XD

Raúl dijo...

pero cómo no voy a leerlo!
ai, tenemos que hacerle una campaña de promoción